* Los directivos aseguran que el cambio es un intento de mejorar.
-Por Sergio Morales |
Con la partida del coach Sergio Valdeolmillos quien estuviera al frente de la Selección Mexicana de Baloncesto y la llegada del coach Bill Cartwright como nuevo entrenador todo parece indicar que el estilo que utilizará el nuevo tricolor será muy parecido al baloncesto que se practica en los Estados Unidos esto por la sencilla razón que el coach Cartwright ha reconocido públicamente desconocer el estilo del baloncesto europeo. Con este cambio es prácticamente un hecho que los sistemas ofensivo y defensivo respectivamente que se venían aplicando con tan buenos resultados serán modificados en mayor o menor nivel según convengan. Para acabar pronto se jugará de manera diferente.
Pero…. ¿Exactamente a que le estamos llamando “diferente”?
Para empezar tenemos que saber cuáles son las principales diferencias entre el baloncesto norteamericano y el baloncesto europeo. Y para no extendernos mucho en definiciones concretaremos en decir que el sistema de juego europeo utiliza mucho la rotación de balón entre los jugadores, el juego de conjunto a la ofensiva y a la defensiva, también priorizan los fundamentos técnicos y tácticos como su gran fortaleza. El aspecto físico es un gran complemento a la técnica y la táctica.
En el estilo norteamericano es un poco a la inversa lo más importante es el nivel físico, los jugadores son en su mayorías más fuertes, más habilidosos, algunas veces más grandes pero eso sí, mucho más potentes. El juego uno vs uno es básico en este sistema y el choque de poderes es el pan de cada día. El aspecto técnico y táctico es un gran complemento a la fuerza y la potencia.
La pregunta aquí es… ¿Qué sistema nos conviene más? o ¿A qué sistema nos adaptamos mejor?
Como tenemos todo el acceso a la NBA, NCAA, NBDL y todas esas espectaculares ligas en las que se practica el baloncesto norteamericano (y no tanto a las ligas europeas) mucha gente seguramente pensará que es una maravilla que nuestra selección adopte este estilo de juego ¿y cómo no? ¿A quién no le gustan las espectaculares volcadas de los Top Ten por ejemplo? ¿Quién no celebra un espectacular crossover en el que un guardia le quiebra los tobillos a su defensa? ¿Quién no grita con todas sus fuerzas cuando se realiza un humillante tapón por todo lo alto? Este tipo de acciones sobre todo para nuestro gran orgullo latinoamericano es muy agradable (como parte de nuestra naturaleza) nos encanta ser los más machos en cualquier terreno de juego en donde participemos y la duela no podía ser la excepción.
Pero hay que ser muy cuidadosos a la hora de catalogar de “blando” o “suave” al baloncesto europeo. Una cosa muy distinta es que un estilo sea más espectacular que el otro y que a simple vista parezca que uno de ellos da la impresión de no ser tan “agresivo” pero hay que ver entre líneas por así decirlo para darnos cuenta que tanto uno como el otro tienen por ejemplo una lucha encarnizada bajo los tableros. Y ni hablar de la defensa férrea en el perímetro. No encuentro bajo ninguna circunstancia un solo motivo para decir que por ejemplo que un clásico Real Madrid- Barcelona de la Liga Endesa es un partido “blando” o un CSKA- Olympiakos en la Euroliga. Estos equipos como decimos en México “se dan hasta con la cubeta” y las defensas son muy agresivas en ambos costados.
Pero volvamos a la definición de los estilos. En un estilo americano se ataca dándole el balón al jugador más capaz para que este rompa defensivas ya sea con sus movimientos, su fuerza, su tamaño o su poder y en base a ese desequilibrio en el uno vs uno se origina la ofensiva “en equipo”.
En el baloncesto europeo la prioridad es la rotación del balón mediante una estrategia táctica en la que participan la gran mayoría de los jugadores ofensivos en cancha. Con el movimiento del balón se generan movimientos también en el costado defensivo y de esa forma se crean “huecos” que deberán ser atacados por el jugador ofensivo al cual le toque esa situación.
Entonces… ¿Qué es ser más agresivos, atacar con un jugador o atacar con cinco?
Lo mismo sucede en el costado defensivo, en el baloncesto americano se utiliza mucho la defensa hombre contra hombre y en el baloncesto europeo la defensa de zona con ayudas.
La misma pregunta… ¿Cuál es la defensa más dura, la defensa de un solo jugador o la defensa de cinco? Esta tal vez no es una pregunta muy justa porque se supone que en ambas defensas deben existir las ayudas y los cambios en la marca pero lo que trato de decir es que una defensa de zona es igual o incluso más complicada de esquivar que una defensa personal.
Ok, ambos sistemas tienen sus ventajas y sus desventajas la cuestión es ver cuál de los dos sistemas nos acarrea más ventajas que desventajas.
¿Y eso de que depende?
Obviamente de los jugadores con los que se cuenta.
En este punto hay que ser lo más realistas posibles. No podemos engañarnos y soñar con cualidades que no tenemos porque la ilusión se nos puede revertir y explotarnos en la cara.
Tomemos como ejemplo a la Selección puertorriqueña de baloncesto. Todos sabemos que es una selección con una gran cantidad de talento individual. Un equipo lleno de espíritu y tradición con jugadores de calidad NBA como JJ Barea, Renaldo Blackman, Arroyo y otros más de mucho nivel. Como todos sabemos su participación en el pasado mundial quedó muy por debajo de las expectativas que de ellos se tenía tanto en Puerto Rico como en el mundo entero y una de las posibles razones por las que este equipo fracasó en el mundial fue su sistema de juego al estilo norteamericano en el que la competencia de uno contra uno en un choque de poderes no fue suficiente para vencer a sus rivales y terminaron abatidos sin poder pasar a la segunda ronda. El nivel de juego individual de los puertorriqueños es muy alto pero quizás no lo fue tanto como ellos lo pensaban y se olvidaron de atacar en equipo. Esta explicación de la derrota boricua no la dijo un servidor, esta explicación fue un acertado análisis del coach C. Morales tras la eliminación de su equipo en el mundial de baloncesto pasado. El coach Morales es entrenador de la selección boricua y uno de los mejores analistas de baloncesto en el mundo entero. Actualmente trabaja en ESPN Latinoamérica junto a Alvaro Martín.
Hay que tener mucho cuidado porque a México podría pasarle algo similar. Los triunfos obtenidos en el pasado reciente (como equipo) pueden llevarnos a pensar que nuestras individualidades son mucho mejores de lo que en realidad son. Claro que sí, tenemos un Gustavo Ayón que es un jugador de clase mundial y varios jugadores con mucha calidad para destacar en el ámbito internacional pero no creo que haya sido el talento individual por sí mismo lo que llevó a estos chicos a tan altas latitudes. Particularmente yo destaco en esta selección el gran trabajo defensivo (en equipo) con muy buenas ayudas, rotaciones y mucho desgaste. A la ofensiva una estupenda rotación de balón (en equipo) para encontrar huecos defensivos.
Desde mi particular punto de vista el mejor jugar de México ha sido la colectividad obviamente impulsada por un Gustavo Ayón que destaca como el gran líder pero a final de cuentas ha sido el trabajo en equipo en ambos costados de la cancha lo que ha dado frutos.
Podemos pensar que tenemos individualidades para jugar al estilo americano en una lucha de poderes uno vs uno. Podemos hacer de este juego la ley de la selva. La ley del más fuerte. A final de cuentas ahí está nuestro orgullo latino para recordarnos que “somos tan machos como cualquiera”.
En mi particular punto de vista el baloncesto no se trata de ser machos, se trata de ser listos y ser listos incluye adoptar el estilo y la estrategia que nos permitan ganar partidos. Si Adoptamos un sistema de juego que será perjudicial para nuestras características como jugadores individuales no solo nos hará el camino más difícil a la victoria…. también puede regresarnos a la mediocridad.
-Por Sergio Morales para Deportes a Lo Latino. Visita su Blog: Enlace.
Porque no jugar al estilo mexicano siendo eclécticos?
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