La selección mexicana sigue haciendo historia, venció 76 a 70 a Argentina y logró colocarse en la final de Caracas 2013, gracias a una actuación sobresaliente de Gustavo Ayón y a un poderío defensivo en el último periodo en la pintura conformado por Lorenzo Mata, Hernández y el mismo Ayón.
México sucumbió con Argentina en primera ronda por marcador de 78 a 98, en un recital extraordinaria de triples y de la mano de un fino y efectivo Luis Scola. México perdió el invicto ante los gauchos, pero aquel equipo mexicano y el que enfrentaron en las semifinales es realmente otro: En siete días México es un equipo con mucha mayor ambición, confianza y capacidad de juego. Y el equipo esta en pleno crecimiento.
Anotación por Periodos
México :20-13-20-22
Argentina: 14-23-21-12
Si en el primer partido México se desdibujó en el último periodo, en este segundo encuentro ante los sudámericanos los aztecas hicieron su mejor episodio.
México sacó algunas ventajas al inicio del partido que Argentina supo remontar con su formula patentada: triples y ataques al cesto de Luis Scola, principalmente. Los hombres altos de Argentina, finos para el tiro, hicieron también daño.
Al final del tercer periodo, Argentina comandaba 58-53, y parecía que su juego era más relajado y fluido que el de México, en ocasión errático e impreciso. Lo que no se pudo producir en ofensiva, habría que encontrarlo en la defensa.
Sergio Valdeolmillos presentó en sociedad al mejor México en este 2013, ese equipo poderoso que incluye a Gustavo Ayón y Lorenzo Mata en la pintura, y apoyado por Héctor Hernández. Entre los tres secaron a los internos de Argentina en el último periodo e hicieron buenas ayudas y recobres cuando los jugadores internos de Argentina se escaparon de los guardias mexicanos: debajo del aro se encontraron con mayores problemas. Argentina se vio imposibilitado para anotar en la pintura, y en los tiros de larga distancia no encontraron respuestas favorables.
Jorge Gutiérrez cambió la dinámica del juego cuando entró fresco de cambio, y anotó seis puntos, gracias a una asistencia de Gustavo Ayón y logró dos robos que terminaron en puntos fáciles para México.
Evidentemente los jugadores exteriores de Argentina Facundo Campazzo (32) y Selem Safar (30) notaron cansancio al tramo final del partido y el equipo que hace siete días hizo un festín triplero ante México terminó ahora con apenas 8 triples en 24 intentos.
México ganó la batalla por los rebotes 38 a 27 y disparó del campo para un 45%, por un 42% de
Jugadores Destacados México
Gustavo Ayón, 24 puntos, 12 rebotes, 3 asistencias, 2 robos en 37 minutos (9 de 18 del campo, 6-9 libres).
Héctor Hernández, 9 puntos, 7 rebotes en 22 minutos.
Jorge Gutiérrez, 8 puntos, 6 rebotes, 3 asistencias, 2 robos en 31 minutos (3 de 8 del campo)
Lorenzo Mata, 9 puntos, 5 rebotes, 2 robos en 19 minutos (4 de 5 del campo)
Jugadores Destacados Argentina
Luis Scola, 18 puntos, 8 rebotes y 5 asistencias en 36 minutos (5-16 del campo)
Facundo Campazzo, 14 puntos, 4 rebotes y 3 asistencias en 29 minutos (5 de 7 del campo)
Selem Safar, 11 puntos y 2 asistencias en 30 minutos (3 de 10 del campo)
Líderes
Era muy posible que el líder que tuviera mejor partido iba a ser capaz de llevar a su equipo al triunfo. Ayón lo logró, y el medallista de oro olímpico, y tremendo jugador, Luis Scola, se quedó en el camino.
Mano divina
En el partido anterior Argentina disparó para un increíble 14 de 21 desde los triples, pero México aprendió la lección, en este segundo juego los exteriores dejaron a los tiradores de Argentina en un más humano 8 de 24 desde los triples.
Calendario
México ya tiene ganada su primer medalla, esperemos que sea de oro, contra Puerto Rico que venció 79 a 67 a República Dominicana.
Mañana miercoles 11 de Septiembre se juega la final s 7:00 PM por Foxsports 2 y www.tves.gob.ve
Y aún hay más
México vino a este torneo con dos bajas en su selección. Jesús Hiram López hubiera sido un tercer hombre interior que hubiera ayudado con minutos de calidad. Adam Parada, en la selección desde 2003, con 2.11 metros, también hubiera colaborado con una más robustecida presencia interior.
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